Soy una copiona, sí, lo reconozco, no lo puedo evitar, tal vez ya has leído en alguna de mis recetas que tengo este mal vicio, no puedo evitarlo, pero lo primero de todo siempre es reconocerlo y en eso estamos amiga. Esta receta la probé en un restaurante de Palma que por desgracia era su último año de apertura, un matrimonio Catalán que cocinaba para los demás como si estuviéramos en su casa, cuanta magia había en ellos, en su restaurante y en sus platos. Por cierto, el restaurante se llamaba «La Mirona» me encanta.
Un buen menú mediterráneo, de temporada, donde predominaban las verduras y el buen gusto, uno de los platos que pedimos para picar eran las alcachofas con parmesano, me hice amiga del dueño, ¿de esos amigos que has hecho en un día pero que si te lo encuentras por la calle le darías hasta una abrazo? pues de estos y me contó que había cocinado las alcachofas en aceite a baja temperatura.
Y así es como conseguí el secreto amigas, y hoy os lo cuento a vosotras. ¿Empezamos?
Ingredientes.
- Alcachofas. ¿Cuantas? pues depende del tamaño y las personas, pero cuenta aproximadamente 1 por persona.
- Parmesano.
- 4 dientes de ajo.
- Pimienta y sal.
- Aove.

Preparación:
Preparar un bol de agua con el jugo de un limón.
Lo primero sería pelar las alcachofas y quitarles los pelillos si es que tiene, el otro día descubrí que hay gente que no cocina las alcachofas porque no sabe pelarlas o les da pereza… ¿en serio? aquí te dejo el proceso (Historias • Instagram).
A medida que las vas cortanto, las vas a ir introduciendo en el bol con agua y limón para que no se oxiden.
En una ollita, pondremos bien de aove, meteremos los dientes de ajo previamente chafados para que se rompa y libere la «alicina» un compuesto que contiene muchas propiedades antibacterianas y antioxidantes, ya que estamos lo aprovechamos bien. Cuando veamos que los ajos se enpiezan a freír es cuando el aceite está listo.
Escurrir bien las alcachofas con un trapo limpio, salpimentar e introducir en la olla, una vez que el aceite se ha vuelto a calentar y se empiezan a freír las alcachofas, bajar el fuego para que se hagan a baja temperatura, es cierto que aquí me cuesta un poco decirte a cuanto bajarlo porque no sé como es tu cocina, pero se trata de que se vayan haciendo poquito a poquito, tienen que quedar doraditas y tiernas por dentro, yo las tuve una media horita.
Luego escurrir y eliminar el exceso de aceite, las colocas encima de un papel, luego las pones en un plato o bandeja bonita y rallar o lascar el parmesano por encima, un poco de aove crudo y un poco de sal gruesa y pimienta y listo.
Gózalas mucho.
Come bonito y sé feliz.